House of Leaves (La Casa de Hojas), de Mark Z. Danielewski
La Casa de Hojas es una novela de horror que juega con la percepción del lector de muchas maneras únicas y novedosas, inclusive para aquellos que leen a menudo.
Para empezar, a pesar de ser un libro completamente ficticio, el mismo se presenta como una colección de cartas de una persona que ha encontrado fragmentos de un libro extraño. Desde este punto el libro empieza a contar múltiples historias:
- La historia de un documental producido por Will Navidson, un Fotógrafo famoso que capturó en video los hechos ocurridos en una casa embrujada. No, no una casa en la cual viven fantasmas. Una casa que está viva, es más grande por dentro que por fuera, y amenaza con perder a sus habitantes en sus pasillos y recámaras que desafían la lógica.
- La historia del libro House of Leaves escrito por Zampanò, un Ciego sin familia ni amigos, y quien parece haberse vuelto parcialmente loco en el proceso de escribir un análisis del documental producido por el Fotógrafo Navidson. Este libro recauda también los aportes analíticos de diversos autores, artistas, científicos, historiadores, y demás profesionales de diversas ramas académicas (de los cuales solo algunos son ficticios). Todos estos profesionales argumentan para validar o refutar la veracidad de los hechos grabados y presentados en el documental, y a la vez buscan interpretarlos y darles sentido (ya sea metafórico, literal, o científico).
- La historia del joven Johnny Truant, un huérfano trotamundos en su infancia que ahora trabaja como artista de tatuajes en Los Ángeles con una vida social activa y hedonista. Es este Tatuador quien encontró y robó los fragmentos del libro dejado por Zampanò después de su muerte en su apartamento y que ahora busca organizar todos los fragmentos del libro mientras su vida pierde control y su sanidad se ve afectada rápidamente.
Ya en este punto estamos lidiando con múltiples niveles de ficción y metaficción que son confusas de explicar, pero las cuales el libro presenta de una manera clara y elegante. Sin embargo, no significa que leer esta novela no sea un reto, ya que dentro del transcurso de sus +700 hojas la historia es relatada en desorden. No solo en desorden de acuerdo con la línea de tiempo. No solo en desorden en cuanto a las historias del Tatuador, el Ciego, y el Fotógrafo.
También dentro de las mismas páginas, el texto busca volverse un laberinto de relatos, referencias, anotaciones, y bibliografías que hacen todo lo posible por rechazar los intentos del lector de comprender la historia que sus páginas contienen.
Este libro es uno de los pocos ejemplos contemporáneos de la literatura egódica y definitivamente una obra literaria que utiliza su medio de una manera que no puede ser replicada por ninguna adaptación.
No esperes ver esta historia en una película o serie de televisión. Si quieres saber por qué alguien pasaría por el esfuerzo de escribir algo tan complejo como esto, tendrás que realizar el esfuerzo de tratar de leerlo y tener una experiencia con un libro que demandará tu atención y colaboración como ningún otro libro que has leído hasta ahora.